Alasino

Aprovecho este espacio para compartir con ustedes algunas cosas que espero les puedan ayudar tanto para lo visto en M2 como para la carrera.

-Artículos sobre urbanismo extraídos de la revista summa+N° 89, el cual me parece un N° interesante dado que trata el tema del espacio público de manera muy clara.


-Por otra parte y hablando de revistas, les recomiendo si está a su alcance la revista AV proyectos, si bien es una revista que viene de afuera, trata exclusivamente de proyectos y detalles constructivos. En estas revistas podemos ver las obras, degrandes arquitectos, pero desde el pto. de vista del proyecto. Creo que como estudiantes le podemos sacar más jugo que a otras revistas. El precio es accesible, dado que su costo es como cualquier revista de arquitectura local.

- Un libro para recomendarles que leí hace poco sobre la ciudad de Buenos Aires. Aunque no trata específicamente de la arquitectura de la ciudad, me parecieron interesantes algunas cuestiones de su historia. “La ciudad al desnudo” autor: Gabriel Di Meglio.

-Para terminar un artículo para Buenos Aires en discusión.

http://www.clarin.com/suplementos/arquitectura/2008/07/15/a-01715094.htm

PD: Me pareció bárbaro esta idea de encontrar un sitio para compartir el conocimiento.



DESDE EL BORDE

La ciudad como hecho social existe, en la medida en que existe la posibilidad de producir la valorización de los espacios públicos. La vida de las ciudades, las relaciones entre los habitantes, tienen sentido en tanto existan espacios articuladores y promotores de vínculos sociales. Esta valorización de lo público, su consideración y tratamiento dentro de la trama urbana como hecho integrador y nivelador social, solicita una actualización permanente.El sector de la intervención está ubicado a la vera del Río Paraná en un área significativa, un sitio histórico y sector recreativo de alto valor referencial, representativo de la ciudad. Las barrancas forman un eslabón entre la trama de la ciudad y el río, recortando este paisaje singular.La intervención busca poner de relieve las condiciones naturales del sitio, el sitio y el paisaje se expresan a través del proyecto, que abarca un tramo de 760 m de largo, con un ancho promedio de 16 m en diferentes niveles.El perímetro del área de trabajo se estableció previamente en función de los requerimientos hidráulicos que determinaron la necesidad de la obra, área que se gana al río y a la zona de la costa degradada. A través del tiempo, esta zona sufrió agresiones por las recurrentes crecidas del río que ocasionaron la desestabilización de las barrancas, causando movimientos y desplazamientos de las mismas. Esto motivó la intervención en el sector con el objeto de estabilizarlas y evitar deslizamientos. Se contemplan las crecidas recurrentes y las inundaciones en el sector inferior, siendo el agua una parte sustantiva de la composición, que penetra en este nuevo paisaje artificial. Integrar este nuevo paisaje a la actual situación de parque, con una arquitectura austera y despojada, permite exaltar el paisaje natural, y otorgar nuevas dinámicas de uso al espacio público. Una estructura de hormigón armado y piedra, resuelve los problemas dedeslizamiento de la barranca, permitiendo consolidar un sector que era de alto riesgo. Esta estructura está compuesta por un sistema de piezas premoldeadas, losas, vigas y pilotes –hincados a una profundidad promedio de 20 metros– y otras fabricadas en el sitio. Sobre el lecho del río y en coincidencia con la obra, se colocó piedra basáltica , como lastre para completar la estabilización del sector. El hormigón armado es usado como componente fundamental en la materialidad del proyecto, por su durabilidad y resistencia en la exposición a usos intensos y posibles crecidas del río. Para el sector inferior, que se plantea como inundable,se utilizó un piso articulado de hormigón armado que permite el crecimiento de césped en sus intersticios.Las losas que componen la estructura de hormigón fueron diseñadas con estrías antideslizantes y grietas para la evacuación del agua de lluvia.Los taludes inclinados construidos con mampuestos premoldeados, pueden ser trepados y se presentan como una alternativa de juego.Las rampas, escalinatas, y desniveles definen ámbitos de estancia y de recorrido, revalorizando el sitio y el paisaje.En el sector donde se encuentra la mayor profundidad del río se proyectó un muelle, en forma de T, para embarcaciones de turismo, trabajando la topografía disponible del terreno como una grieta en el nivel de vereda predominante que se resuelve con una escalinata y rampas que vinculan ámbitos nuevos y existentes, y permiten una apropiación diversa y lúdica de los distintos sitios. De la memoria del autor


EL DOMINIO DE LO LATENTE


PLAZA DE CISNEROS, MEDELLÍN, COLOMBIApor Guillermina AbeledoLa reivindicación del espacio público parece ser una constante en los escenarios urbanos mundiales de los últimos años. Ejemplos notables dispersos a nivel global refuerzan el rumor de que es la ciudad el ámbito para la transformación social. Es así como el espacio público deviene en catalizador de voluntadespolíticas y aspiraciones cívicas de comunidades que aspiran a la consolidación de la identidad y del bien común.La ciudad ya no es la resultante sino que implica un programa anticipatorio y una intervención intencionada. Los vínculos de indiferencia y conflicto se transforman en otros de reciprocidad e integración. Estrategias de inclusión y democratización modifican y re-signifcan el paisaje urbano, escenario de nuevas formasparlamentarias donde la arquitectura cobra toda su dimensión política. El fenómeno tiene también su lugar en Latinoamérica. Con administraciones discontinuas y recursos mínimos, comienza a reconocerse el valor redentor que llevan implícitas ciertas acciones sobre el espacio común. Colombia apuesta al espacio público y lo convierte en objeto de sus deseos de progreso y resurgimiento político, social y cultural. Ciudades como Medellín se convierten en zonas de oportunidad, lienzos en blanco que otorgan al arquitecto la chance de proponer sobre el lugar y definir nuevos paisajes. Guayaquil supo ser uno de los sectores más importantes de la ciudad, transformado en un espacio depreciado, residuo de la migración de las principales actividades mercantiles hacia otras áreas. El objetivo principal encarado por las autoridades fue recuperar el sector y su carga simbólica. Valiéndose del encanto de lo existente, sumar nuevos usos complementarios vinculados a programas cívicos, culturales y comerciales en pro de la reconquista de los espacios degradados.El planteo para la Plaza de Cisneros es original, pero sobre todo, específico. La propuesta surge de las entrañas mismas del sitio y de la sociedad que le dio vida y a la que hoy representa. Nueva marca en el territorio, se define sin opacarlo, encarnando las deseadas transformaciones que la arquitectura es capaz de producir, permeable tanto a figuras del pasado histórico como a las visuales lejanas del paisaje montañoso que rodea la ciudad y que es parte del espíritu paisa.Plaza de la Luz. La idea surge de las bases mismas del concurso al que se convocó para intervenir tan significativo sector de la ciudad. Descartar lo obvio. Imaginar la luz primera. Construir para el día. La luz en la naturaleza, sin energía eléctrica, luz esencial. Concepto disparador, guía en el proceso proyectual, elemento distintivo que en su originalidad poético-constructiva convirtió a la propuesta en ganadora.Peláez no imagina espacios, imagina situaciones. Relaciones posibles, conductas, atmósferas. Se vale de recuerdos y referencias comunes; los explicita y los pone a disposición de todos. Con el fin de la representación, los materiales con los que se mueve la arquitectura ya no son los mismos ni el espacio se define de la misma manera. La selección de elementos casuales y cotidianos, la abstracción y la síntesis, sumados al refinamiento y sofisticación de las soluciones técnicas son los recursos de los que se vale el autor. Evocación, alusión y reflejos; efectos de multiplicación y repetición mediante, la obra se define como no-espacio, como no-arquitectura. Su sutil trabajo sobre la luz y la materia se potencia en su asociación para esta obra con su padre, el reconocido artista Luis Fernando Peláez, concibiendo una intervención a mitad de camino entre la escultura y la arquitectura. La dualidad parece ser el hilo conductor que vincula los distintos recursos que se manejan en esta obra, quedando el margen de libertad en poder del visitante. El sitio es tabula rasa. En directa referencia al antiguo mercado y con la absoluta convicción de la necesidad de rescatar el perímetro como anclaje al contexto, a partir de un volumen completo comienza un ejercicio de sustracción. Las intenciones proyectuales tenían que ver con una plaza permeable a la ciudadque existe alrededor y donde la permanencia fuera posible. Trascender lo conocido para re-significar, disparar nuevas asociaciones, adueñarse de estos espacios públicos que son de todos y de cada uno. Ser símbolo y refugio.











ELEMENTOS DE LO PUBLICO
POSIBILIDADES ASOCIATIVAS Y PERFORMÁTICAS DE LA ARQUITECTURA, A TRAVÉS DE DOS OBRAS DEL ESTUDIO COLOMBIANO PLAN B por Martín Di Peco
¿Cual es el rol de la arquitectura en la conformación del espacio público? ¿hay lugar más allá de la disciplina edilicia para aproximaciones más sutiles a la construcción de lo colectivo? ¿es siempre necesario el edificio como condensador social?
En noviembre de 2000 se organizó en Medellín la feria EPM. Si bien era pleno verano colombiano, la salida dejaba helados a sus visitantes. Es que debían caminar por un corredor enmarcado por dos muroshechos de hielo y un espejo que prolongaba su efecto visual. “Hicimos construir bloques de hielo, como ladrillos, que permitieran armar paredessustentadas por una estructura de metal anclada al suelo, y aislada con neopreno.Algo sencillo, pero que captaba luz de un modomuy preciso, dejaba pasar el aire, para acelerar el derretimiento y el cambio de temperatura del aire. Queríamos pasar de las formas al desgaste y a los charcos de agua.... las personas pisaban los charcos, se reflejaban en ellos y en los espejos, y la temperatura bajaba varios grados centígrados. Armamos las paredes tres veces por la mañana, y a las 4 de la tarde, ya estaban derretidas y destruidas” [1] Haciendo prevalecer el efecto generado y el cambio percibido por sobre la presencia de lo construido, Plan B congela la duración de la obra. A pesar de hacerle cumplir un rol efímero, el edificio perdura en el recuerdo del acontecimiento. Singulariza un espacio haciendo irrumpir una novedad en el sitio, impregnándolo en la memoria colectiva.Porque algo nuevo ha sucedido, ese lugar ya no es el mismo a pesar de que ninguna construcción quede en pié allí. El pasaje de lo permanente a lo transitorio a través de situaciones que construyen un ambiente pasajero da lugar a la aparición del evento como objeto arquitectónico, y el edificio pierde su rol protagónico. “Arquitecturaen hielo” introduce los protocolos del teatro en el campo de la arquitectura, en el sentido en que el edificio “actua”, hace algo, se modifica dramáticamente en un lapso muy breve: desaparece, se derrite en pocas horas en un espectáculo performático. “Hay enconsecuencia tiempos, duraciones en acción en o ante esos objetos a los que se supone instantáneamente reconocibles [unos bloques de hielo apilados] hay relaciones de puestas en presencia recíproca, hay por lo tanto sujetos que otorgan a los objetos (...) una garantía de existencia y eficacia. Se trata aquí de la relación entre el objeto y su lugar (...) en tanto encuentro de objetos y sujetos. [2] Es este encuentro sorpresivo de feriantes y bloques de hielo a la salida de una exposición lo que da sentido a la obra, lo que explica su razón de ser, su “aquí y ahora”. Participando como profesores en un curso de vacaciones en Medellín, los Plan B diseñaron el proyecto - experiencia “arquitectura en combustión” para darle inicio. La cuadrilla de construcción se organizó entre los mismos estudiantes y profesores. Entre todos cortaron ramas y las transportaron hasta la cancha de arenilla de la universidad; cavaron unas zanjas para fundar estas estacas, ramas de madera cruda de pino, armando dos contornos con un “interior”. Luego de unas charlas dictadas por el profesor invitado Carlos Mesa, tituladas “Arquitectura de aire”, se pasó en horas de la tarde a la quema de los perímetros de madera. En esta performance colectiva, no es ya solo el edificio el que “actúa” (se derrite / se quema) sino que toda la comunidad que le dio forma y luego lo destruye interviene en el “guión”. “Hace falta producir una corriente de aire entre el espacio real y el ficticio. Este último vacreciendo desde el interior, y no se debe intentar someterlo a un orden arquitectónico, sino que hay que dejarlo flotar en un estado de fusión en medio de la realidad. Se trata de generar un espacio como fluido, en el que sucedan incesantemente movimientos de ida y vuelta entre la ficción y la realidad. [3] La acción se ubica justamente, en medio de, a través de un objeto que produce al mismo tiempo una experiencia “real” y “estética” ¿De que otra forma se puede estar más involucrado en la arquitectura (no adentro o afuera, sino en medio de), que envuelto en la construcción y consumición de ella misma?“Este proyecto es un proceso abierto e inestable, reflexivo y arquitectónico; a medio camino entre la fogata y la choza. Empieza con el crecimiento de algunos árboles. Las ramas caídas o cortadas son afiladas y clavadas en la tierra, son utilizadas como material de construcción para elaborar dos perímetros de troncos. Se genera así un recinto que permite reuniones diurnas y lecturas. Debido a su geometría estos contornos concentran actividad en su interior y conducen el paso en su exterior. Con este proyecto queremos entender la arquitecturacomo acontecimiento y como proceso. Como amplificación de situaciones específicas, en este caso, la del esgaste, la transformación y la oscuridad. Nos interesa hacer perceptibles la noche por medio de las llamas, y la transformación a través de la madera, del humo, las cenizas, el sonido, el fuego y el carbón. Pasar del material al gasto y uso, y de las formas al aire; involucrando la reunión y el paso de las personas, sus palabras y gestos, por medio de eventos variados. Entendemos el fuego como destructor y devastador, como acelerador de procesos y generador de nuevas etapas pero también como reunión y festín.” [4] Mientras que “arquitectura en hielo” hace actuar al conjunto librándolo a su suerte, dejándolo que se derrita, “arquitectura en combustión” avanza en el esquema de edificio (objeto) performador y público (sujeto) espectador, ya que la construcción/ destrucción de la cosa pública es compartida e inducida. La performance pasa a ser colectiva, ambas partes interactúan, dando lugar a la pregunta sobre cual es el objeto público: ¿es la doble hilera de troncos clavados en la arena, con un interior vemente sugerido?; ¿ o es la construcción y posterior destrucción colectiva de ese objeto, que inaugura una fiesta? Tal vez la pregunta pueda ser ¿cuándo hay espacio público? En ese caso podríamos hablar de ocasiones públicas, más que de espacio público, idealmente infinito. El espacio puede estar ahí disponible, pero hace falta “fabricar” una experiencia en el tiempo para que devenga realmente público. En estas obras la arquitectura aparece como infraestructura que da lugar a que suceda lo público, como una serie de dispositivos a través de los cuales se re-inventa la presencia de un sitio, “devolviendo a la arquitectura el rol de dar forma a la vida social y cultural” [5] a través de conectar emplazamientos, recursos naturales, instituciones. “Estas relaciones determinan en un sentido puramente pragmático lo que uno puede llamar “las capacidades” de la obra, o sea, lo que es capaz de afectar, transformar o hacer” [6]Paradójicamente, las capacidades y el alcance de estas obras fugaces exceden el gesto instantáneo, superan lo efímero de la acción justamente porque su carácter volátil permite quebrar el “flujo profuso y orgánico en el que las cosas se dan, para aislar instantes en un campo ‘discreto’, como secciones proyectadas”. [7] Aquí la arquitectura actúa provocando un cambio, introduciendo una novedad. Al sustraernos del continuo discurrir del tiempo, podemos aislar instantes con límites identificables, como fragmentos diseñados. Y es que no solo de bloques de hielo y troncos están hechas las obras de planB, sino que también, y fundamentalmente, están hechas de tiempo. Tiempo en su sentido fenomenológico pero también como eslabones de cotidianeidad: “entendemos la arquitectura como una amplificación de situaciones concretas, como una técnicaafectiva, que hace perceptible con más énfasis los hechos cotidianos o paradigmáticos de nuestro transcurrir” [8] La arquitectura de plan b re-significa su lugar, lo carga de sentido colectivo, señalándolo a través de acciones performáticas. “Arquitectura en combustión” y “arquitectura en hielo” critican el rol tradicional de la arquitectura en la configuración del espacio público y el del estado como único responsable en la tarea de dar forma a lo colectivo. En ellas el “edificio” no es solo un contenedor que aloja programas o funciones con cierto alcance público; al dejar su lugar central para volverse un momento más de una cadena de sucesos e implicaciones,su construcción funciona como una gran excusa para que suceda lo público. Estas obras de Plan b vuelven visibles las redes sociales, productivas e institucionales que posibilitan la creación (y destrucción) de un doble objeto público: el edificio efímero y los procesos que le dan forma.
NOTAS[1] Bernal, Alejandro y Mesa, Felipe. Plan:b – Acuerdos parciales, Mesa editores, Medellín, 2006. (www.planbarquitectura.com - juanfelipemateo@hotmail.com)[2] Didi-Huberman, Georges. Lo que vemos, lo que nos mira. Manatial, Buenos Aires, 1997.[3] Ito, Toyo. “Una arquitectura que pide un cuerpo androide” en Escritos, Colegio oficial de aparejadores y arquitectos técnicos,Murcia, 2000.[4] Bernal, Alejandro y Mesa, Felipe, ob. cit.[5] Kwinter, Sanford. Architectures of time, MIT Press, Boston, 2002.[6] Kwinter, Sanford, ob. cit.[7] Kwinter, Sanford, ob. cit.[8] Bernal, Alejandro y Mesa, Felipe, ob. cit.

1 comentario:

cátedra lombardi, fadu, uba. dijo...

hola:
efectivamente el artículo "elementos de lo público" es muy bueno: lo escribió martín di peco, que es un amigo de la cátedra (si te interesa su punto de vista podés ver en la entrada "extensión" la referencia a su proyecto "rally conurbano").
saludos.
lombardi.